El Inversor

Digamos: “Espíritu Santo ayúdame a vivir esta experiencia maravillosa del Inversor. Gracias por visitarme en este momento, gracias Jesús, gracias”.

Estos días hubo un apagón tan grande que todos los inversores de esta zona de Nagua se descargaron. No había luz, no había abanicos, mucho calor. Las personas se sentían incómodas.

Como todos sabemos las personas para solucionar el problema de la luz, de los apagones, van ahorrando sus chelitos para tener su inversor y así gozar de un poco de comodidad y de bienestar.

El Espíritu puso esta enseñanza preciosa del Inversor. ¿Para qué sirve un Inversor? Para tener luz cuando no hay luz. ¿Qué necesita para dar luz? Que esté cargado. Si no está cargado o si se descarga no da luz, seguimos a oscuras sufriendo.

ORACION PERSONAL

Papá Dios nos regala 24 horas al día y nos invita a cargar el inversor de nuestro corazón cada día. ¿Cómo cargo el inversor de mi corazón?

Cada día voy a dedicar media hora, 30 minutos, para dejar que Jesús cargue mi inversor. Jesús nos dice en su Palabra: “Yo soy la luz del mundo, el que me sigue no caminará en tinieblas; sino que tendrá la luz y vida” (Juan 8,12).

Entonces voy a sacar media hora sólo para que Jesús, que es la luz, cargue el inversor de mi corazón y, así pueda tener luz en mi vida y alumbrar la vida de los demás con “caridad, alegría, paz, paciencia, fidelidad bondad, generosidad, mansedumbre y dominio de sí”, San Pablo a los Gálatas 5,22-23.

Y a los niños(as) los estamos invitando 10 minutos para dejar que Jesús cargue el inversor de su corazón y tengan luz permanente en su vida.

Esa media hora o diez minutos para estar sólo con Jesús. Dialogando con El, preguntándole, consultándole y escuchando su voz, su palabra de vida. ¿Qué te parece: es mucho tiempo? A solas con El. Sin estar ocupado en otro asunto. Es una entrevista privada con Jesús que dio la vida para salvarnos (Juan 3,14-21).

Nos podemos ayudar de la Biblia, de la Palabra de Dios. Si seguimos la lectura diaria que nos ofrece cada día la Iglesia… sería mejor. Hacemos lo del pollito cuando bebe agua: Toma agua y levanta el piquito. Así, leo unas líneas de La Palabra y levanto el corazón para dialogar con Jesús, con Papá Dios, con el Espíritu Santo. Con quien tenga más cercanía de los tres. Para escuchar lo que me dicen a mí.

COMO JESUS ORABA

También nos puede ayudar el Ave María. Pero, esa media hora no es para rezar el Santo Rosario. Lo rezamos pero en otro momento. Esa media es para orar como Jesús oraba: “En aquellos días se fue a orar a un cerro y pasó toda la noche en oración con Dios” (Lucas 6,12).

No fue cuando lo bautizó Juan a Jesús que recibió una unción del Espíritu Santo: “Un día fue bautizado también Jesús entre el pueblo que venía a recibir el bautismo. Y mientras estaba en oración se abrieron los cielos: el Espíritu Santo bajó sobre él y se manifestó exteriormente en forma de paloma, y del cielo vino una voz: “Tú eres mi Hijo, hoy te he dado a la vida” (Lc. 3,21).

JESÚS SE PASABA MOMENTOS A SOLAS CON SU PADRE Y NOS INVITA A PASAR MOMENTOS DE INTIMIDAD CON EL.

Jesús nos recuerda en Juan 15,5: “Yo soy la vid y ustedes los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto, pero sin mí no pueden hacer nada”. Todos queremos dar fruto y mucho fruto y buen fruto. ¡A cargar el inversor!

Alguien dirá: “¿y no es mucho tiempo media hora? Y, ¿cuánto tiempo gastamos viendo un programa de T.V., viendo las noticias, una película, un juego de pelota, jugando dominó o cartas?

Si ese interés que tienen tantas personas de ver la tele-novela se tuviera para cargar “el inversor del corazón” los frutos serían muchos y muy buenos. Animo, dígale: “Señor Jesús, dame la gracia de sacar esa media hora, esos diez minutos para cargar mi inversor. Quiero tener luz para mí, para mi familia, para mis vecinos, para mis amigos. Gracias Jesús por visitarme en este momento, gracias”.

SI NO PUEDO O NO SÉ LEER

La persona que no puede leer o no sabe leer saque esa media hora y hable con Jesús, cuéntele de su vida, consúltele y guarde silencio para que Jesús le hable al corazón. Cuántas bendiciones nos perdemos y, ahora, ¡Cuántos regalos vamos a recibir! ¡Animo!

Vale la pena sacar esa media hora para tener bien cargado el inversor y tener luz las 24 horas del día. Nuestra vida va a cambiar, Jesús nos va a hacer personas nuevas y vamos a tener familias nuevas y una nueva sociedad.

¡Ánimo! Que estamos llamados a metas altas: “Sean perfectos (santos) como es perfecto (Santo) el Padre de ustedes que está en el cielo (Mt. 5,48; Lev. 19,2).

Una señora salió de un retiro con el firme propósito de sacar media hora de oración diaria y a los pocos días “se le acabó la gasolina”. Me pidió que la confesara y ese era su pecado mayor: no cumplió.

Al confesar que no podía hacer media hora de oración le dije: ¿Por qué no hace 24 horas de oración? Me miró asombrada y me responde: si no puedo media hora menos 24 horas. Continué: precisamente esa media hora es la que le va a ayudar para que tenga las 24 horas de oración y su vida se convierta en una vida de oración.

Cuando entro en la gasolinera a echarle combustible al vehículo no estoy perdiendo tiempo. Si corro y corro y corro y no echo combustible tengo el peligro de quedarme sin gasolina y voy a perder más tiempo porque me quedó averiado por el camino.

EL PROBLEMA ACTUAL

Eso es lo que está matando al mundo de hoy. Todos esos atracos, asesinatos, muertes, secuestros, droga, vicios es porque estamos andando sin combustible. Estamos averiados. Tenemos descargado el inversor de la vida y vivimos a oscuras. Por eso dijo Jesús: “Si un ciego guía a otro ciego los dos van al hoyo” (Lc.6,39).

Animo a dejar que Jesús nos cargue el inversor y vamos a tener luz las 24 horas del día. Jesús, gracias. Gracias Jesús, por amarme tanto, gracias por invitarme a estar a solas Contigo para llenarme de tu amor, de tu gracia, de tus bendiciones. Gracias Jesús por cargar mi inversor. Trato hecho: ¡Desde hoy a cargarlo!

¿Si nosotros que sacamos ese momento para orar caemos cómo será los que viven descargados? Dice la Palabra de Dios que el justo cae 7 veces al día. Imagínense, nosotros los pecadores ¿cuántas veces más?

Por eso el momento más importante es estar con Jesús para poder ser discípulos (alumnos) y así podremos ser misioneros (apóstoles-maestros). En Aparecida-Brasil los Obispos nos recordaban que todos por nuestro bautismo estamos llamados a ser discípulos-misioneros. ¿Tu inversor está cargado?

PRIMEROS TESTIMONIOS

Compartiendo esta experiencia del “inversor” en una comunidad campesina, “Los Guayabitos”, un señor preguntaba si lo podía cargar de noche o al medio día. Una campesina le responde con mucha sabiduría: Lo mejor es si tú te levantabas a las 6,30 a.m. ahora te vas a levantar a las 6,00 a.m. para cargar tu inversor. Te levantas media hora antes y a dejar que Jesús te cargue el inversor. Es buena idea ¿verdad?

Por donde voy pasando: calle, oficina, teléfono, peaje, etc, etc. Les pregunto a las personas: ¿qué inversor tienes en tu casa? Las respuestas sobran: no tengo, se me dañó, tengo de un kilo, de tres kilos y les digo: Aquí tienes el último modelo de inversor para tener luz 24 horas.

Unos me responden: ¿A qué precio? Otros: ¿Ahí está el teléfono para llamarlo? Otros: Tengo muchas deudas para hacerme de otra deuda.

A unos amigos les pregunté y contestó ella: El que tenía me quemó todo y no quiero. Continué: se lo dejo en casa. Sigue: No quiero. Sin embargo, se lo dejé y la risotada al ver el inversor. Me llamó para hacerme la historia de lo molesta que estaba cuando llegó a su casa preguntando por el inversor que me dejó el P. Leonardo para devolvérselo.

A ella la llamó otra amiga del grupo de oración muy enojada porque le dejé un inversor. Por teléfono, me cuenta, que se desahogó y despotricó contra el P. Leonardo que ahora está metido vendiendo inversores. Al final le contó en qué consistía el inversor y se morían de la risa. Parece que llegó el 28 de Diciembre adelantado con “los inocentes”.

Animo a levantarte media hora antes y “verás la gloria de Dios” (Juan 11,40). Me cuentas algunos testimonios en el correo electrónico. Gracias y felicitaciones por darle la oportunidad a Jesús para que tu vida esté iluminada 24 horas al día. Que no tienes Biblia, a conseguirte una. Pide prestado como haces con otras cosas. Pero paga.

Un cristiano sin Biblia ya demuestra que tiene descargado su inversor. ¡Animo y Felicitaciones!

ORACIÓN COMUNITARIA

Esa oración personal es la que nos prepara para que nuestra oración comunitaria sea viva, sea llena del poder del Espíritu Santo. Cuando todos los cristianos tengamos el inversor cargado nuestras celebraciones serán una verdadera fiesta y saldremos encendidos en el amor de Dios a llevar ese amor.

La Eucaristía, los sacramentos, el Rosario y los encuentros comunitarios, los retiros serán “Un Pentecostés Permanente”.

Noviembre 2010
Los Bendigo en Jesús y en María
P. Leonardo Roa Torres
Parroquia “San Miguel Arcángel”. Las Gordas – Nagua. R.D.
Tel. 809-753-8440 E-mail jesussanahoy@gmail.com
y puede bajar de la página web: www.sanacioninterior.net

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